Días intensos de amistad y amor en La Manzana

Febrero ha resultado esta vez, un mes doblemente especial.

Primero, porque nos ha permitido fortalecer los vínculos de convivencia sana y aprendizaje interactivo, en un espacio donde coincide la diversidad de pensamientos que puede caber en una niña de siete años, o en una de 84; sus experiencias de vida y su relación con el tejido.

Y segundo, porque nos coloca en la antesala del primer aniversario de aquel primero de abril en que comencé el aleccionador viaje al frente de un proyecto con el que siempre soñé.

Quizá por eso, el pasado 14 de febrero lo festejamos por todo lo alto, en un ambiente de fiesta donde la suerte me sonrió también por partida triple, pues en el intercambio de regalos me tocaron un par de mitones preciosos, elaborados por las ágiles y habilidosas manos de Alma, del Club Tejiendo con Aroma de Café.

Pero además, me tocó el premio de la rifa, que organizó Carmelita en una más de sus brillantes ideas, al llevar para ser sorteado, un ejemplar de "El Club de los Viernes se Reúne de Nuevo", la segunda parte de la novela de Kate Jacobs, imprescindible en la cabecera de toda tejedora de corazón, como lo es Carmelita.

Y por si fuera poco, me tocó ser partícipe de una reunión bastante divertida.

Las imágenes muestran un poco de lo mucho que se disfrutó en esta convivencia.

Y si así estuvo esta fiesta, hay que ir imaginándonos como estará la del próximo Primero de Abril, para apagar la primera velita en el pastel de La Manzana, a la que por supuesto, están invitadas todas.

Amigas, muchas, muchísimas gracias por serlo.